Las Preocupaciones de Tilea - Capítulo 2

Las Preocupaciones de Tilea (Tilea no Nayamigoto Isekai Jashin Tensei Kitan) es una obra de Rina Shito y mi única participación es la traducción no oficial de la misma al español.

Capítulo 02: ¿Camila La General Demoníaca? ¿Quién es esa?

—Timu…

Mi amada hermanita sufrió un abrupto ataque de Chuunibyou. Eso me congeló del shock.

—Hmm. No importa. Hoy es un día para celebrar, pues mi clan ha despertado. Seré misericordiosa y perdonaré tu vida —y escupiendo tan arrogante línea, Timu se marchó sin mostrar interés alguno por lo que había hecho.

¿Qué fue lo que dijo?

¡Rey Demonio y seis generales demonio!

Esto es terrible.

Incluso se ha dado una posición que va directo al punto. Por experiencia propia se que Timu está totalmente obsesionada con este asunto. S no hago algo inmediatamente, el futuro de Timu estará en peligro.

Dejé la casa para perseguirla.

¿A dónde fue?

Busque por todos lados para encontrarla.

¡Bingo! Aunque, realmente se ha alejado bastante.

Timu estaba por dejar el pueblo. Pensé que había corrido tras ella inmediatamente, pero parece que me equivoque. El tiempo pasó mientras estaba shock. Procesando este echo, observo a Timu y parece que se dirige a algún lado.

¿Debería ir por ella y traerla devuelta?

No, espera. Si no me equivoco, ella dijo «clan».

¿Es que se va a encontrar con alguien?

Tal vez Time ha hecho amistad con otros chuuni, o peor aun, tal vez sea la influencia de sus nuevos amigos lo que causa esto. Si, eso debe ser.

Decido entonces seguirla a hurtadillas. Si tiene amigos con chuuni regañarla a ella sola no será suficiente después de todo. Necesito corregir a sus amigos también, o si no…

Seguí a Timu desde una distancia prudente para que no me notara, ya que Timu volteaba a revisar cada tanto. No ser descubierta realmente fue complicado, ocultándome bajo la sombra de los edificios al moverme.

Pero, diablos, Timu si que es rápida. Mientras mantenía la distancia, parecía que habíamos atravesado toda la montaña antes de darme cuenta. Nunca había pasado del Monte Beruga, ¿sabías?

A demás, ¿no es demasiado rápido?

En términos de velocidad de coches, sentí que nos movíamos a sesenta kilómetros por hora. Podría ser que realmente estemos haciendo algo extr… No, no, no, eso no puede ser verdad. Estuve por tener una recaída.

Por poco tuve un pensamiento chuuniesco como en mi vida anterior.

Este es uno de esos momentos, cuando pienso que las cosas son extrañas por considerarlas bajo la perspectiva de mi vida pasada. ¡Eso es! ¡Es obvio que en este mundo todos son rápidos! No tenemos automóviles después de todo y prácticamente siempre nos desplazamos a pie, esto naturalmente a fortalecido nuestras piernas. Sesenta kilómetros por hora no es más que una percepción. No es como si estuviera usando algún aparato para tener una medida real. Esto no es más que la velocidad normal y por aun tener la percepción de mi vida pasada es que se siente rápido.

Aclarado eso, continuo siguiendo a Timu.

Sin embargo, mi hermanita debe contarse entre las personas más rápidas de este planeta. Timu sólo tiene catorce años y casi no sale de casa y, aun así, va a la misma velocidad que yo, una cocinera que entrena trabajando duro diariamente. Si se entrenara podría tener la vida de una atleta.

Aunque no estoy segura si en este mundo exista el concepto de deporte. Mas en cualquier caso, mi vida gira entorno a la cocina, por lo que tengo una gran ignorancia sobre este mundo. Mis padres están totalmente dedicados a la cocina también. Y en un pueblo pequeño, que bien puede considerarse provincia, no hay un buen flujo de información en realidad. Pero dejando eso de lado, si en este mundo existe el concepto de deporte, entonces quiero que Timu participe. En verdad pienso que ejercitarse sanamente curaría su chuunibyo después de todo.

Y mientras pienso en esto, parece que llegamos a nuestro destino. Timu entró sin más dentro de una gran cueva.

¡Vaya! Así que había una cueva así por aquí…

De un solo vistazo, parecía una cueva bastante normal. Mas lo que la diferenciaba era la majestuosa puerta colocada en la entrada flanqueada por dos ominosas estatuas a cada lado.

Mmm, por donde lo veas, esto huele a chuuni. No hay duda de que los amigos de Timu están aquí. Y lo peor es que parece que estos son bastante ricos. Los hobbies de los ricos…

Estoy segura de que son arrogantes. Me voy a romper la espalda intentado enderezarlos. Pero no me puedo detener por miedo. Por el bien de Timu, me hago de valor y entro en la cueva.

El interior de la cueva es oscuro y se ve exactamente como el tipo de lugar en el que viviría un monstruo. Realmente hicieron un gran trabajo al encontrar un lugar tan apropiado. Y no puedo creer que honestamente estoy elogiando la iniciativa de estos chuuni.

Continuo buscando adentrándome en la cueva y cuando llegó lo bastante lejos…

¿Cuántos cientos de personas están aquí?

Una gran multitud se alineaba frente a un hombre. Este hombre, que tiene la atención de todos, lleva puesta una armadura de cuerpo completo. Una apariencia bastante cliché. Me acerco a hurtadillas y pongo atención a lo que dice aquel hombre de armadura.

—¡Todos, el día que habíamos estado esperando por tanto tiempo al fin ha llegado!

—¡YEAHHH! —a causa de las palabras de aquel hombre, toda la gente ruge excitada a la vez.

¿Eh? ¿Será acaso que algún tipo de evento para fanáticos lo que está sucediendo hoy? Y a mi parecer el entusiasmo es del nivel que los de los conciertos en mi vida pasada. ¿Quién diría que había este tipo de eventos de cosplay en este mundo también?

A demás, al poner atención al interior de la cueva, puedo ver que hombres bestia, hombres pájaro y personas de todas variedades se han reunido aquí. Pero a pesar de eso, ¿Cuándo se habrá enterado Timu sobre semejante evento?

Últimamente me he quedado totalmente absorta en mi entrenamiento de cocina y al reflexionar sobre ello, me doy cuenta que no había notado el cambio en Timu.

…

……

………

—La resurrección de Zorg-sama está al alcance de la mano. Debemos reorganizar nuestro ejercito inmediatamente —continuó su discurso el hombre de armadura.

—Es como dice. Por favor guíenos —contesta la multitud.

—Muy bien. Entonces. ¡Avancen! ¡Ofrezcan sacrificios a Zorg-sama! ¡Destruyamos a todos los humanos!

—¡Seee! ¡Por el bien del gran señor Zorg, lo haremos!

Una vez que el discurso terminó, casí todos los presente dejaron el lugar. Los único que permanecieron dentro fueron el hombre de armadura, Timu y otros diez personajes.

—¿Yose, en qué condiciones se encuentran Los Seis Generales Demoníacos en este momento? —preguntó el hombre de armadura.

—Señor, en este momento, de entre los seis generales, sólo Luxembourg-sama y Poe-sama no han despertado.

—Hmm. El despertar siempre varía de una persona a otra, es inevitable —comenta y voltea a ver a Timu—. Entonces la destrucción de La Gran Capital quedará en tus manos, Camila.

—Mi unidad por si sola será suficiente —declara Timu rebosante de confianza.

Su comentario, su tono y más que nada, esa embrujante sonrisa mientras arrojaba su cabello por arriba de su hombro, cautivo a los presentes en un remolino de encanto.

¡HA! ¡Esto no es bueno! Como se pusieron a hablar con tanta seriedad quedé atrapada en la ilusión.

Parece que realmente están planeando un evento muy interesante. Y como en este mundo existe la mágica, estoy segura que será aun más divertido que en mi viejo mundo.

A demás Timu está tan bien metida en su rol, que por un momento terminé pensando que ella no era realmente mi hermanita, si no la General Demonio Camila. Timu realmente tiene talento para la actuación. Pero en este momento, como su hermana mayor, tengo que regañarla como se debe.

Saltarse su trabajo en el restaurante y jugar fuera a estas horas es un problema. Como pensé, cuando el Chuunibyou alcanza niveles extremos, nada bueno puede resultar del mismo.

Di un paso al frente de detrás de la roca donde me escondía y con gallardía me aproximé al claro donde Timu y el resto estaban reunidos.

—Etto… Hola, soy la hermana de Timu, Tilea —me presento—. Pareciera ser que últimamente han sido amables y permitido que Timu juegue con ustedes… —hago una pequeña reverencia al hombre con armadura para demostrar mi gratitud y después volteo a ver a mi hermana—. ¡Timu! ¿Por qué te saltas tu trabajo en el restaurante? No estoy diciendo que no puedas jugar. ¡Pero tienes que cumplir con tus responsabilidades! —le digo con claridad.